Empresa constituida válidamente según las normas legales y cuenta con las
autorizaciones, según la Dirección General de minería,
requisitos y características correspondientes para la comercialización y procesamiento
de minerales. LA EMPRESA desarrolla las actividades indicadas por su propia
cuenta, costo y riesgo, contando con sus propios recursos financieros y
materiales y demás referidos a la actividad minera.